La represión, lo mas mierda de México, lo mas pinche, lo ke no se dice en los noticieros, todo LO MAS PINCHE a continuación...
Un Estado es aquel que tiene el "monopolio sobre la violencia legítima"- Max Weber
“es gente que no tiene la mas mínima capacidad de razonar, siempre debió haber habido la congruencia y el espíritu de diálogo, de apoyo y respeto, nomás que hay gente que no, pues que no, no piensa”
- Lorenzo Fernández Nieto, director de la Policía Sectorial del DF [link]
El ejercicio de captar la imagen a lo largo de la historia ha pasado de ser el privilegio daguerroptípico del retrato a una prohibición abierta en la que sólo pueden participar personas con ciertas credenciales. La imagen se ha desvalorizado desde que una masa de cientos de millones de aficionados aprietan el disparador cada día, sin que importe que en la mayoría de los casos siga existiendo una gran diferencia entre la calidad de la foto del aficionado y la del profesional.
El problema de polarizar a las masas es que el análisis se vuelve demasiado superficial y otorga características a un grupo dentro del cual existen individuos con ideas totalmente contrarias a esas características. El problema entonces de encontrarse en una masa polarizada sería que, aun cuando no se esté de acuerdo con ella y no se actúa como ella, al estar de su lado de la valla uno se vuelve para los demás igual de manifestante (Según Todrito.com), igual de encapuchado (Según el Milenio), igual de detenido (Según La Crónica), igual de denunciante de la policía capitalina (Según El Financiero), igual de transeúnte falso (Según El Universal), inclusive uno se vuelve un joven vestido de darketo (Según La Jornada).
Ahora, aclarando, a pesar de que fui “detenido”, aparezco como denunciante gracias al sentido común de la gente de la Agencia 50 del Ministerio Público (Mejor conocida como “El Bunker”) que a pesar de la tardanza me enviaron a tiempo al hospital Xoco y aceptaron que yo estaba ahí para tomar fotografías y que ni me fui a manifestar ni mucho menos…no, NOOOO… soy darketo.
Claramente en la fotografía tomada por el respetadísimo y talentosísimo Jorge Serratos, (Autor de glamorosas imágenes de los Rolling Stones e impactantes imágenes de la APPO en Oaxaca del 2006), se ve como tengo una cámara fotográfica en la mano derecha, específicamente una Lumix DMC-FX8 de Panasonic, es decir una cámara no profesional…también vemos como no soy un Darketo, pero que si cumplo con las características de vestimenta para calificarme como un lanza-piedras, cabecilla de un grupo anarquista de porros. Entonces si quiero seguir con mi carrera como fotógrafo independiente (Que no en vano ha dejado inclusive dos exposiciones fuera del país), tengo que comprarme un chaleco de fotógrafo, una gorra que diga PRENSA y llevar una aparatosa Cannon AE-1 a todas partes… ¿No?...pues no, pienso que aun con eso corro el riesgo de ser golpeado y obligado a declarar en contra de “encapuchados misteriosos” para salir del MP… ¿Acaso a Bradley Will lo salvó tener una cámara HD en la mano?...¿O a Lydia Cacho la salvó el Premio Estatal de periodismo de Quintana Roo?.
Como pasó todo:
Me encontraba yo tomando fotografías a todo esto de la manifestación en contra de la visita de Bush a México, afuera de la embajada de EU en México cuando las vallas fueron rotas por grupos anarquistas y de repudio al imperialismo estadounidense…pronto la avenida Reforma se llenó de gas y la confusión reinó.
Cabe aclarar que el director de la Policía Sectorial del DF, Lorenzo Fernández Nieto salió previamente a la manifestación, sabiendo que iba a provocar…sospecho que esto fue la justificación para que los granaderos (-“gente que no tiene la mas mínima capacidad de razonar”- como diría el propio Fernández Nieto) rompieran filas y en vez de dedicarse a defender la embajada como tenían ordenado, salieran a detener gente.
Al preguntarle que quién había dado la orden de lanzar los gases lacrimógenos, el comandante dijo desconocer quién había sido y hasta aseguró que la policía "nunca se movió de su sitio".- Jorge Alejandro Medellín, El Universal, Miércoles 14 de marzo de 2007 [link]
(Entonces, si la policía nunca se movió de su sitio…yo me fui a meter a que me golpearan al cerco de granaderos) Bueno, si él es el encargado y no sabe quien da las órdenes, lo considero totalmente incapaz para dirigir no digamos a la Policía Sectorial, para dirigir un puesto de tamales.
Cuando los granaderos salieron, claramente vimos los presentes como las primeras víctimas de los golpes fueron las mujeres, estos valientes y viriles servidores de la ley cruzaron la avenida para golpear a una chica en la entrada de un café y mientras tanto yo registraba todo al lado de otra fotógrafa…cuando al hacerme para atrás un granadero me vio al tirarle una foto y comenzó a gritar “¡Ese hijo de la chingada! ¡Él estaba con ellos, él estaba con ellos!”. (Ese razonable caballero es quien aparece del lado izquierdo de la foto mirando hacia la cámara, el mismo que me pateó los testículos al entrar al cerco)
Dos de ellos quedaron a un par de metros de los policías y fueron sometidos rápidamente por cerca de 20 uniformados, que los golpearon con toletes y escudos y los patearon en el piso. Los demás corrieron sobre los dos sentidos de la avenida Reforma rumbo a la Zona Rosa. En el trayecto fueron detenidos tres manifestantes y conducidos al cerco policiaco.- Jorge Alejandro Medellín, El Universal, Miércoles 14 de marzo de 2007 [link]
Supongo que en ese momento me transformé mágicamente en uno más del “grupo de presuntos "porros" de la UNAM que se cubrían el rostro con pasamontañas, paliacates y otras telas” (Icela Lagunas, El Universal, Miércoles 14 de marzo de 2007 [link]), por que mientras uno me ahorcaba con la bufanda, los demás me golpeaban con los puños hasta que una vez en el centro del cerco me tiraron al piso y me patearon hasta que no me pude mover.
En su declaración, afirmaron que después de que fueron replegados con gases lacrimógenos grupos de al menos cinco granaderos los patearon en repetidas ocasiones en todo el cuerpo, utilizando los escudos de acrílico para agredirlos. (Notimex, El Universal, Miércoles 14 de marzo de 2007 [link])
Volviendo a la premisa de que no podemos generalizar a todos los sujetos en la masa, un granadero (Cuyo nombre desconozco pero me encantaría tener el gusto) me jaló de un brazo hacia un árbol y me preguntó lo que hacía ahí, dejando que le explicara a gritos que sólo estaba tomando fotos y que soy estudiante de periodismo.Los primitivos de azul seguían saludando mi madre y pateando mis costillas.
Para ese momento ya mi ropa estaba llena de sangre y el granadero heroico (Ja) tomó la cámara, le sacó la batería y la tarjeta de memoria y me sugirió que guardara mis cosas para que los demás no me las robaran (Que triste que él mismo se supiera dentro de un nido de ratas). Me levantó y me ordenó ponerme la chamarra encima de la cabeza para que no me siguieran pegando en la cara…yo sólo veía el suelo y las botas que se acercaban a mi estómago…respiraba por la boca ya que la nariz la tenía llena de sangre.
Caminé unos diez metros hasta que de repente me levantaron la chamarra y me agarraron del pelo, ahí estaba el mismísimo Lorenzo Fernández Nieto, ese anciano de uniforme azul lleno de insignias que me comenzó a golpear con puño cerrado la cara mientras expresaba sus afectivos sentimientos a mi madre. No recuerdo si antes o después de eso pero alguien me tomó fotos justo enfrente de la embajada.
A continuación el épico granadero me aseguró que me iba a llevar atrás del edificio para que me echara a correr “hacia la chingada”. El problema fue que en la calle Danubio, todos los granaderos que bajaban de los camiones estacionados tenían la necesidad de sacar las frustraciones de sus miserables y granaderas vidas y…pues yo estaba ahí para servirlos, me agarraban de los brazos, se echaban a correr y me lanzaban contra el suelo para patearme, esto sucedió un par de veces.
Al llegar al fin a la calle de atrás, lo prometido no funcionó ya que justamente la patrulla que llevaba a los otros dos “detenidos” (Uso las comillas porque en nuestras declaraciones falsas dice que los tres acudimos voluntariamente a declarar) estaba atascada en el tráfico y en vez de correr “hacia la chingada”, fui subido al vehículo y terminó la locura.
El sentimiento que te da cuando vas con la cara ensangrentada dentro de una patrulla, en medio de automóviles de vouyeristas que hacen como que no te ven o se auxilian de sus espejos para llenar su morbo es lo mejor que saqué de esa experiencia, digo ¿No diario te pasa eso o a uno de tus amigos? (Bueno, si vives en Nezahualcóyotl o en una zona ruda pues si)...es como una locura post-traumática o un referente al Club de la Pelea de David Fincher.
En fin, cuando terminó la locura, llegué al MP y la verdad después de lo sucedido esperaba más golpes y más presión para que dijéramos ser de algún grupo anarquista pero no…sólo nos dijeron que el daño fue de más de medio millón de pesos y que si no hacíamos lo que ellos decían lo íbamos a tener que pagar. Éramos dos estudiantes y un borrachín de la calle que obviamente no teníamos ese dinero…después de algunas horas de que nos preguntaron más de veinte veces nuestros nombres y lo que hacíamos, nos llevaron al hospital, la patrulla se descompuso así que unos judiciales, la verdad, bien buena onda, nos montaron en su auto y nos llevaron a las radiografías (Por cierto que en el primer hospital no nos pudieron atender porque no había placas, jeje).
Para las cinco de la mañana terminaron los trámites y al amanecer ya estábamos los tres detenido-denunciantes en donde iniciamos el día anterior…el borracho en la calle (Sólo que ahora con una nariz rota y con temblorina de abstinencia de alcohol), el estudiante de arquitectura con sus papás (Solo que ahora con varias puntadas en la cabeza) y yo en mi cama (Sin poder dormir por los chichones que me dolían al apoyar la cabeza contra la almohada). Los tres con un coraje tremendo y una impotencia absoluta.
